
El reciente nombramiento de Diana Marcela Morales, quien anteriormente ocupó el cargo de Secretario General de IV en la Cámara de Representantes y mantiene una estrecha relación con el liberalismo, como Ministro de Comercio, no es más que la manifestación inicial en una serie de movimientos estratégicos que han tenido lugar dentro del alto gobierno, cuyo objetivo principal es avanzar en la votación de una Consulta popular.
La designación de Morales ha generado un fuerte enfrentamiento dentro del Partido Liberal. Mientras que algunas facciones del partido lo vinculan estrechamente con el exparlamentario Simon Gaviria, quien es, a su vez, descendiente del ex presidente César Gaviria Trujillo, la dirección de la comunidad sostiene que representa una cuota de los parlamentarios liberales del Senado.
Diana Marcela Morales reemplazará a Luis Carlos Reyes. Foto:Tiempo
En efecto, la llegada de Morales ha causado revuelo, puesto que una gran parte del Partido Liberal se mostraría favorable a la consulta popular. A pesar de que la creación de este nuevo ministerio se había discutido desde principios de año, se formalizó el nombramiento de Morales apenas el sábado 10 de mayo.
Este nombramiento podría resultar beneficio para figuras como Fabio Amin, Jhon Jairo Roldán, Jaime Durán, Juan Diego Echavarra, Laura Fortich y Claudia Pérez. Cabe resaltar que estos últimos se habían alineado con el petrismo al respaldar la creación de los comités para el “sí” durante la consulta popular que se llevó a cabo en Soledad, Atlántico, siendo figuras prominentes en el evento respaldado por el presidente Petro.
César Gaviria – Una película de la consulta popular Foto:Archivo
Otra cita en el gobierno
Se ha observado con particular interés que, en los últimos días, durante la discusión de la consulta, el sitio web del solicitante presidencial ha publicado los currículos de quienes se sumarán a la Comisión, lo que ha generado un efecto considerable.
Un ejemplo significativo es la llegada de Lina Beatriz Franco, quien fue oficialmente designada para ocupar la oficina presidencial de la Agencia Nacional de Minería. Ella reemplaza a Álvaro Pardo en dicha institución.
Asimismo, se formalizó la llegada de Karen Schutt al Ministerio de Comercio, mientras que Katherine Rojas Montenegro fue nombrada directora del Fondo de Adaptación.
Además, Julián Molina ocupará el cargo en el Ministerio de TIC, una cartera que ha estado bajo la administración de ‘la U’ desde el inicio del gobierno.
Julián Molina, Ministro de Tecnología de la Información (Información y Comunicaciones) Foto:Sergio Medina / Tiempo
Esta es la situación en la consulta popular
Hasta el momento, el “No” cuenta con 13 votos de conservadores, 12 de los cambio radicales, 10 liberales, 2 de la Alianza Verde, y 2 de ‘U’, sumando un total de 35.
(Nota: el número mencionado fue erróneo; la suma correcta hasta 35 es en realidad 44. Es posible que haya un error en la fuente original o que se haya omitido un hecho importante).
Por otro lado, a favor del “Sí”, hay 19 votos del Tratado Histórico, 5 de Common y 1 de Mais, así como 10 votos en la Coalición Centro Esperanza, 7 de ‘La U’ y 7 liberales, acumulando un total de 49.
MP del Senado Fabián Díaz en el Parlamento con León Freddy Muñoz y Angélica Lozano. Foto:Nostor Gómez / Tiempo
El equilibrio se presentará con el número de cuatro votos de Colombia libre y El Mira. La votación estará a cargo de Aico, Paulino Riascos, quien proviene del Tratado Histórico, pero se distancia del partido gobernante, y Ortega Temístocles, conectado con cambios radicales y cercano al gobierno. La situación de Norma Hurtado, de “U”, también influirá en el desenlace.
Los conservadores han tomado decisiones delicadas, pues Carlos Andrés Trujillo, Miguel Ángel Barreto y Diela Liliana Benavides están en un proceso de elección al gobierno, pero no podrán participar en la votación, lo que podría beneficiar al gobierno en términos de alineaciones políticas.
La consulta popular del gobierno de Petro será discutida el martes Foto:
La votación requerirá una mayoría simple, lo que significa que la dinámica de las relaciones entre las fuerzas políticas también jugará un papel crucial. Se espera que al menos 100 parlamentarios del Senado participen en la votación, buscando que ese número mágico supere los 50.
Mateo García
Centro