Un equipo de ingenieros ha progresado que podría cambiar el futuro de los materiales sostenibles: la creación de un plástico comestible Hecho por Desechos industriales Y un hongo especial. Esta innovación trata de ofrecer una alternativa ecológica para reducir el uso de plásticos tradicionales y aliviar el impacto ambiental de los desechos.

De desechos a material sostenible

El proceso comienza con desechos industriales que se tratan y se combinan con un tipo de hongo que puede transformar estos desechos en un Biomasa comestible. Este material no es solo las propiedades de los plásticos convencionales, como su flexibilidad y resistencia, sino también Biológicamente degradable y adecuado para el consumo humano.

Los ingenieros explican que el hongo utilizado tiene una estructura celular que permite hojas y contenedores con una apariencia de plástico, pero completamente seguro para el medio ambiente.

Ventajas para el planeta

El desarrollo de este plástico comestible representa una solución doble: por un lado, por un lado, por un lado, Utilizar desechos industriales De lo contrario, terminaría en ecosistemas de vertederos o contaminantes; Por otro lado, reduce la dependencia de los plásticos de petróleo, uno de los más importantes responsables de la contaminación global.

Además, su habilidad para ser comestible se abre Embalaje de alimentos que no tiene que eliminarse antes del consumoReduce así la producción de basura.

Siguientes pasos de investigación

Aunque los primeros resultados son prometedores, los investigadores señalan que todavía están trabajando Mejorar la textura, el sabor y la gran producción De este material. El objetivo es que en el futuro se puede usar en contenedores, utensilios desechables e incluso en sectores como la medicina, en los que se requieren cada vez más materiales biodegradables.

Un futuro verde

Este progreso científico muestra esto Innovación y biotecnología Puedes transformar los problemas en oportunidades. Cuando se ha alcanzado su producción en masa, este plástico comestible podría marcar uno antes y después de la lucha contra la contaminación por los plásticos.