El gobierno de Nayib Bukle intensificó su campaña contra la “ideología de género” que se llama SO en 2025, con nuevas pautas que prohíben el contenido de la diversidad sexual y la educación sexual integrada en escuelas y centros de salud.

El Ministerio de Educación repitió la orden de eliminar los materiales relacionados con el género y las sanciones de alerta. Al mismo tiempo, el Ministerio de Salud eliminó formas que incluían orientación sexual e identidad de género.

Las organizaciones LGBTQ han condenado un clima creciente con exclusión y censura y señalaron que estas medidas agravan la discriminación. “Nos usan como chivos expiatorios”, dice Erick Iván Ortiz, del Caucus de Igualdad Global.

En respuesta, grupos como el movimiento LGBT+ ampliado se han reorganizado para defender los derechos y hacer visibles que “ningún ataque a la diversidad sexual resolverá los problemas del país”.

Al mismo tiempo, la Embajada de los Estados Unidos abrió un Instituto de Investigación de Violencia Basada en Género para abordar estos problemas de la sociedad civil.