La suspensión parcial del gobierno federal estadounidense, que comenzó el 1 de octubre de 2025 Al expirar una resolución temporal de financiación, se ha desatado una crisis operativa en varios sectores, incluido el transporte aéreo.

Impacto en el sector de la aviación

  • Falta de personas clave
    Miles de funcionarios, así como la TSA (Administración de Seguridad del Transporte), trabajan sin remuneración, lo que ha aumentado las bajas por enfermedad y, a menudo, los retrasos.
    En algunos casos, la torre de control de los aeropuertos más pequeños tuvo que cerrarse temporalmente.
  • Retrasos y cancelaciones masivos
    Durante los primeros días del cierre hubo Miles de vuelos retrasadosPrincipalmente en aeropuertos como Los Ángeles, Nueva York, Chicago, Denver y Boston.
    Algunas operaciones fueron subvencionadas voluntariamente por la FAA para mitigar el riesgo de sobrecarga operativa.
  • Reacción de aerolíneas y viajeros.
    Algunas aerolíneas han dicho que no ven cambios significativos (por ejemplo, Delta informó que más del 90% de sus vuelos se mantienen).
    Pero muchos viajeros planifican o interrumpen sus viajes en medio de la incertidumbre.

Qué pueden hacer los pasajeros

  • Consulta el estado del vuelo con la aerolínea antes de acudir al aeropuerto.
  • En caso de cancelación, solicita la devolución o replanificación sin coste adicional.
  • Si hay grandes retrasos, tenga en cuenta los posibles derechos de compensación, incluso si las regulaciones estadounidenses actuales no exigen que las aerolíneas cubran el alojamiento o las comidas.

Reacciones y contexto político

  • Presión del Congreso
    Este cierre pone de relieve la urgencia de un acuerdo entre legisladores para reactivar funciones significativas.
  • Riesgos para la temporada de viajes más alta
    Los analistas advierten de que si la parada se prolonga puede afectar a finales de año y reducir la confianza en el mercado de viajes a Estados Unidos.
  • Comparaciones con cierres anteriores
    A finales de 2018-19 se produjeron importantes desórdenes en el tráfico aéreo, especialmente en Nueva York. Esta vez, la situación emerge más rápido y en más regiones de Estados Unidos.