Ocho años después del asesinato que sacudió el Duitama, Nobsa, Boyacá, absolvió y movilizaron el país, Tribunal Superior en Santa Rosa de Viterbo Wilmar Fabián Macías, el único condenado por el asesinato de Ángela Lucía Sánchez Tristanch de solo 13 años. Obtuvo catorce cuchillos, en su mayoría cerca del corazón, en el pecho y el cuello. El ataque ocurrió en su propia casa. El agresor vive frente a la casa de Angela.

Una noche que marcó a Boyacá para siempre

El Asesinato de Ángella Lucía Sánchez TristanchoUna niña de solo 13 años ocurrió en 2017 En el municipio Nobsa, boyacáY dejó una herida que hasta hoy todavía está abierta en la memoria colectiva de Boyacenses.

La trágica noche, Ángela Lucía fue atacada con un arma blanca Dentro de su propia casa. Su agresor, que vivía justo a la vanguardia de su casa, según los hechos probados en ese momento, Herió sus catorce en Cuello y pecholo deja gravemente dañado. Se transfirió inmediatamente a Hospital regional de Duitamapero debido a la gravedad de las heridas, Murió poco después.

La escena era DANTH. Todo el país se conmovió para conocer los detalles. El hecho fue cubierto por los medios nacionales más importantes que Noticias de CaracolEl Los informantesEl Tiempoy RCNy generó un rechazo profundamente social. Hubo movilizaciones, relojes y ciudadanía que requerían justicia para una niña que acaba de comenzar a vivir.

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La primera condena que ya no existe: 33 años para asesinato agravado

Después de la investigación, Wilmar Fabián Macías CubidesUn joven sordo del mismo municipio fue señalado como el sospechoso más importante y Sentenciado principalmente a 33 años de prisión Para el crimen contra asesinato exacerbado.

La decisión fue recibida con cierto alivio por la familia y la sociedad. Pero desde el principio había Versiones encontradasTom en el proceso y reclamos de sectores que solicitaron una mayor rigidez en la investigación, incluida la posibilidad de Tendrían más involucrados.

Incluso en la primera oración, se registró que continuaría investigando si fue la participación de otras personas. Nada de eso pasó. Pasaron ocho años y No hubo progresoNi un nuevo atrapado ni respuesta.

El apoyo legal: el crimen que fue sentenciado

Según la legislación colombiana, El crimen de asesinato agravado se cree en Artículo 104 del Código Penal Colombiano:

Artículo 104. Asesinato exacerbado.
El castigo será Doscientos ochenta y quinientos meses en la cárcel Cuando se comete el asesinato, entre otras circunstancias:

  • Preparar, facilitar, lograr o ocultar otro crimen;
  • Sobre persona menor de dieciocho años;
  • Con sevice;
  • O coloque a la víctima en una situación de impotencia.

Angela Lucía tenía 13 años. Fue atacado con Sevicia. Murió en casa. El caso, donde sea que mire, siguió los criterios para el artículo.

La revocación: irregularidades o negligencia judicial?

El pasado 12 de julio de 2025El caso sacude de nuevo Boyacá: él Tribunal Superior de Santa Rosa de Viterbo recordó la condena Contra Wilmar Macías y ordenó su libertad inmediata.

La decisión, que ha sido incluida como un “Malazo a la justicia” por muchos votos, cuenta con el apoyo de Defensor público Mercy Yolima Cepeda Espinelque afirmó que:

  • No hay evidencia directa Ese enlace Macías con el crimen.
  • La escena del crimen fue contaminado por parientes Antes de que llegara la policía legal.
  • La inspección no siguió los protocolos técnicos básicos como Inspección lofoscópica, delimitación de rutas de accesoni manejo adecuado de Cadena de almacenamiento.
  • Ropa de ropa se recogió en la casa del acusado sin una orden válida o presencia de defensa.
  • La presencia de uno Intérprete oficialviola sus derechos fundamentales como persona con pérdida auditiva.
  • La madre del acusado recibió para participar en la diligencia sin ser advertido de su derecho a ser silenciado.

Todo esto, según la defensa, constituyó graves violaciones del proceso correcto y sirvió como argumento para descartar la evidencia y presentar Libertad inmediata a los únicos condenados.

Una madre que no olvida y un país que no entiende

Que ha sido más afectado por esta nueva decisión es la madre de Angela Lucía, Cecil de todos modosquien no dudó en expresar su malestar a través de las redes sociales:
“Hoy es uno de los días en que me quedo con un gran pecado en el alma … ocho años después de su muerte, su asesino es libre como si no hubiera pasado nada”escribió.

Sus palabras reflejan sentimiento de una familia rotapero también eso en una sociedad que se pregunta ¿Qué tipo de justicia permite un crimen tan cruel sin responsable?.

¿Es más importante la rigoración en el proceso o la memoria de las víctimas? ¿Y qué garantías son para una madre que, después de ocho años, todavía está esperando respuestas?

Leyes suaves que parecen olvidar a los imperdonables

Hoy, el crimen de Angela Lucía Todavía está impune. No hay creencias ni progresos fijos y tampoco hay claridad. Solo hay ira.

Boyacense – -Society, especialmente en Duitama y Nobsa, nuevamente la voz relevante. Porque No puede ser que el tiempo borre todo. Puede que no haya protocolos de almaEl procedimiento tampoco garantiza que ignore el dolor profundo dejado por el asesinato de una niña.

Y para, aunque la ley puede fallar, La memoria no prescribe.

El cierre que no permite olvidar: ¿qué sucede si mañana vuelve a suceder?

¿Cómo explicas qué Wilmar Macías Cubides¿El hombre condenado por el asesinato de una chica de 13 años es libre?

A 14 palo cerca del corazóncomprometido en la casa con la familia afectada, termine en nada?

Quien entiende que se le considera todas las garantías –su pérdida auditiva, errores de procedimiento, la legalidad de la inspección– Pero que Angela Lucía nunca ha sido garantizada incluso el derecho a vivir?

¿De qué sirve tanto proceso, tanta audiencia, ambos archivos, ambos desgaste emocional? La justicia se diluye y prevalece la impunidad?

¿Quién protege más este sistema? ¿A las víctimas o que logran burlarse de las fallas con características técnicas?

Aquí está Una sociedad con miedo, una justicia sin respuesta y un mensaje perverso: que ni siquiera los peores crímenes garantizan el castigo en Colombia.


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