El diputado del Senado Iván Name ha comenzado a expresar su rechazo a diversas acusaciones formuladas por ex asesores de Sandra Ortiz. Estas acusaciones tratan sobre una supuesta conexión del diputado con el escándalo en torno a la elección de Vladimir Fernández, quien fue el ex primer ministro adjunto y abogado ligado a este caso. Dicha situación ha generado un gran revuelo mediático y político en el país.
De acuerdo con las acusaciones, que fueron reveladas hace una semana, Iván Name sería responsable de un pago ascendente a 3.000 millones que implicaría la conexión con el entonces presidente del Senado. Este acto no solo habría beneficiado a la reforma del gobierno de Petro, sino que también se sugiere que el nombre de Fernández estaba en la lista de beneficiarios de esta situación.
Vladimir Fernández, Sheriff Foto:Archivo privado
Para dar sustento a estas acusaciones, un periodista ha compartido una captura de pantalla que muestra una conversación entre Vladimir Fernández y el acusado en el escándalo legal AGR. Sin embargo, en esa conversación, no se revela ninguna actividad considerada ilegal en relación al agradecimiento por los esfuerzos del funcionario que estaba vinculado al nombre de Iván Name.
Antes de que estas acusaciones surgieran, Iván Name había comenzado un proceso de defensa pública, argumentando que las revelaciones del periodismo mostraban un sesgo claro. En sus palabras, afirmó que estas acusaciones son consideradas de “forma parcial, paranoica e irresponsable”, y que “las filtraciones de estos mensajes de WhatsApp conducen a conclusiones inaceptables y engañosas”.
Es importante señalar que Iván Name justificó su interacción con Fernández diciendo que es normal participar en estas conversaciones, especialmente dado que Fernández tenía “un interés legal en el procedimiento en cuestión”. En este mismo sentido, sostuvo que la información discutida era pública y que esto no implica necesariamente un “comportamiento indebido”.
Nombre de Iván, ex presidente del Senado. Foto:César Melgarejo/ Tiempo
El ex presidente del Senado, Iván Name, admitió haber mantenido una reunión privada con el magistrado Vladimir Fernández, aclarando que había hecho lo mismo con otros solicitantes. En sus propias palabras, “Por supuesto, me reuní en mi oficina, oficialmente, con docenas de funcionarios, incluido el Dr. Vladimir Fernández, al igual que con otros abogados enviados por el presidente”.
Finalmente, el interrogador que presentó los mensajes filtrados asegurò que esta revelación se utiliza como evidencia de la fragilidad del proceso judicial, afirmando que deben recurrir a la prensa para “cuestionar la justicia y desestimar la verdad legal de los hechos”.
Para concluir, Iván Name afirmó: “soy el primero en exigir las consecuencias de la justicia para aquellos que actúan ilegalmente y busco la verdad dentro de la severidad y dignidad de la justicia, pero nunca a través de filtraciones malintencionadas”.
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#Politiquando con Maria José Pizarro. Foto:
Juan Sebastián Lombo Delgado
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