
Cada 30 de julio, el mundo se moviliza para cumplir con una de las violaciones más dolorosas contra los derechos humanos: la trata de personas. Lejos de ser un problema del pasado, este crimen permanece vigente y adaptándose a nuevas formas de explotación. Afecta principalmente a mujeres, niñas, migrantes y personas en una situación vulnerable.
La estrategia de este año pone una pequeña pregunta visible sobre la mesa: la trata de personas por delitos obligatorios. Muchas veces, que se vieron obligados a cometer crímenes, son criminalizados, sin recibir apoyo o reconocimiento como víctima. Esta injusticia alimenta el ciclo de explotación.
Lo que pasa en Colombia
En Colombia, la situación es compleja. El defensor del pueblo ha identificado 109 casos de trata de personas entre enero y junio de 2025, donde la mayoría de las víctimas eran mujeres, junto con miembros de la comunidad LGBTIQ+. Los propósitos más comunes: explotación sexual, trabajo forzado y camarness.
El caso en el número de informes no representa necesariamente una reducción en los casos, sino una posible falta de quejas. Esto ilustra la urgencia de mejorar los canales de comunicación y fortalecer la educación social sobre cómo identificar el crimen.
¿Cómo prevenirlo?
El comercio humano puede comenzar con una oferta atractiva, una relación afectiva o una falsa oportunidad de empleo. Por lo tanto, es básico detenerse para analizar cada situación. Migrar regularmente y tener información confiable son pasos importantes para reducir el riesgo.
De “Your Life Changes”, los ciudadanos llaman para participar activamente en la red de seguridad. No es solo gobiernos, sino por cada persona que puede ayudar a informar, cuidar y venir.
Este día requiere compromiso
El 30 de julio representa una oportunidad para confirmar el rechazo total de alguna forma de esclavitud. Conocer, prevenir y actuar son pilares para proteger la libertad y la dignidad de aquellos que pueden convertirse en víctimas. Porque la trata de personas no solo se lucha con las leyes, sino con solidaridad, responsabilidad y acción colectiva.