Israel está intensificando considerablemente su ofensiva militar. El gabinete de seguridad, que está bajo la dirección del primer ministro Benjamín Netanyahu, aprobó de manera unánime un plan que implica la ocupación extendida de la franja de Gaza. Varias fuentes oficiales han sido citadas por medios de comunicación israelíes, indicando que la nueva estrategia israelí incluye objetivos de conquista territorial, la permanencia indefinida de tropas en la región y un llamado a decenas de miles de reservistas. Este nuevo plan también establece que la asistencia humanitaria será distribuida bajo control militar, lo que ha generado un gran debate.

Este cambio en la política israelí representa un punto de inflexión marcado respecto a las declaraciones anteriores de Netanyahu, quien había afirmado que Israel no regresaría a Gaza después de la retirada en 2005. Esta decisión se toma en gran medida en respuesta a las presiones internas dentro de su gabinete, particularmente de figuras como Smotrich e Itamar Ben Gvir, quienes han estado promoviendo la reintroducción de asentamientos civiles en la zona.

Durante la reunión del gabinete, el nuevo comandante del ejército, Eyal Zamir, advirtió que este movimiento podría comprometer la vida de al menos 24 rehenes israelíes que Hamas todavía mantiene en su poder. Sin embargo, esta advertencia no impidió la aprobación del plan, lo que ha provocado críticas severas por parte de las familias de los secuestrados, quienes acusaron al gobierno de “priorizar el territorio sobre la vida humana”.

Ayuda humanitaria, condicionada y bajo control israelí; Ayuda humanitaria bajo control militar: el nuevo plan israelí en Gaza

Además de la intensificación de la ofensiva, el gobierno israelí ha aprobado un nuevo sistema para la distribución de la asistencia humanitaria en Gaza. Este sistema será gestionado por empresarios privados, excluyendo la participación directa de organizaciones no estatales o de agencias de la ONU, las cuales han expresado su rechazo a esta propuesta. Según el nuevo mecanismo, solo se permitirá la entrada de 60 camiones diarios; esto representa una décima parte de lo que se permitía durante el último alto el fuego.

El sistema establece que cada familia recibirá un paquete de asistencia limitado, que solo será distribuido tras un escaneo de seguridad, lo que incluso podría incluir la recolección de datos biométricos. Las agencias humanitarias han advertido que este nuevo modelo infringe principios fundamentales como la imparcialidad, la neutralidad y la independencia, además de poner en peligro la vida de los civiles al obligarlos a entrar en áreas militarizadas para acceder a la ayuda.

En una declaración conjunta reiterada, las organizaciones humanitarias han señalado que el plan ignora las necesidades de los más vulnerables, incluyendo a personas con movilidad reducida. También han advertido que esto podría resultar en una crisis aún más grave para los 2.4 millones de habitantes de Gaza, muchos de los cuales ya están desplazados debido a la ofensiva israelí en curso.

Las Naciones Unidas condena la falta de comida en la Franja de Gaza. Asistencia humanitaria bajo control militar: el nuevo plan israelí en Gaza.

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La comunidad internacional sobre la advertencia del nuevo plan de Israel

La estrategia adoptada por Israel se presenta en un contexto regional extremadamente tenso. Netanyahu no solo ha reafirmado su intención de implementar un plan similar al que fue promovido por Donald Trump, el cual se denomina “resultado voluntario” de Gazatis hacia otros países como Egipto o Jordania, sino que también ha comenzado a emitir amenazas directas contra Irán y los Hutis, particularmente después de los recientes ataques procedentes de Yemen.

El inicio formal de la operación, que ha sido denominada “Gideon Cars”, dependerá del desarrollo de las negociaciones en curso respecto a los rehenes. En caso de que no se alcance un acuerdo antes de la visita programada de Trump a la región, se ha informado que el ejército israelí iniciará una ofensiva total “que no se detendrá hasta que se cumplan todos los objetivos”, según ha indicado una fuente del ámbito de defensa.

Al mismo tiempo, la situación humanitaria en Gaza sigue deteriorándose de manera alarmante. La comunidad internacional observa con gran preocupación el nuevo plan de Israel, que muchos interpretan como una estrategia encubierta de recolonización. Tanto la ONU como varios gobiernos han solicitado a Israel que actúe con moderación y respete las normas del derecho internacional humanitario, aunque hasta el momento estas solicitudes no han tenido un impacto significativo en las decisiones de Netanyahu.