A la 1:00, el sábado 26 de julio, un joven oficial de policía de 20 años de Ubaté fue encontrado como José Fernando Camargo Bastidas, sin vida en el camino que conduce a la acera del mundo, en Pereira. Tuvo 16 efectos de pelota, incluido el sexo en su cabeza, uno en cada oído, y los demás en el cofre, los brazos, la espalda y la columna.
Este fue el hecho: un crimen ejecutado con sevice
EN Mañana el sábado pasado 26 de julioPereira fue nuevamente la escena de la violencia cruda. Un joven fue encontrado sin vida en el camino que conduce a la acera Nuevo Mundoen corregimiento por Puesto de corsalExactamente frente al motel Amar.
Estaban alrededor 01:00 Cuando los residentes del sector informaron Varias fotos. Poco después, la línea 123 se anunció en presencia de un cuerpo que se encuentra en el borde del camino. Los testigos afirman haber visto uno Vehículo gris a toda velocidad Del sitio.
16 disparos y un mensaje de terror
Cuando las autoridades llegaron a la escena, las autoridades encontraron al joven en medio de uno Lago hemático y con exposición de masa cerebral. No tenía documentos, pero horas después Medicina legal lo identificó como José Fernando Camargo Bastidasdifícilmente 20 añosnativo de Ubaté, Cundinamarca.
Presentado 16 efectos divertidosEntre ellos Sexo en la cabeza “Uno en cada oído”, y los demás en el pecho, los brazos, la espalda y la columna. Una ejecución Con alta victoriaClaramente cubierto.
¿Quién era José Fernando?
De acuerdo con la información preliminar del joven proporcionar servicio militar en Pereira. Había dejado su país, UbatéCon la esperanza de cumplir con el país y servir a tantos otros jóvenes. Aunque fue brutalmente asesinado y abandonado.
Silencio, miedo e impunidad: la investigación está progresando lentamente
La inspección técnica fue realizada por unidades de Sijin criminalistaPero en el área No hay cámaras de seguridadEl No hay testigos directos Y el silencio reina. De nuevo, la impunidad se siente cerca.
Las autoridades manejan como Hipótesis preliminar cualquier posible ajuste de las cuentas entre estructuras criminales, pero hasta ahora No hay prisioneros Sin progreso importante.
¿Cuánto tiempo seguirán cayendo nuestros jóvenes?
Este no es solo otro asesinato. Es Una nueva pérdida de un joven colombiano quien decidió servir y terminó asesinado de la manera más cruel. José Fernando No tenía antecedentesNo estaba en guerra, pero la violencia sacudió todo.
¿Cuánto tiempo serán los jóvenes, los patrulleros, los soldados, las personas que han puesto sus vidas en el país en el país? ¿Cuántos más morirán por esta guerra sin sentido para detenerse? ¿Cuántos más deben realizarse y olvidarse al borde de un camino rural?
No podemos seguir normalizando eso La juventud es la carne canónica de una violencia que no le da un alto el fuego.
Pereira y la sombra de la muerte: un patrón repetido
Este crimen agrega una preocupante ola de asesinato en Pereiradonde se vuelve cada vez más común encontrar víctimas abandonado sin identificación En el campo. El camino a Armenia se ha convertido en uno corredor de la muerteDonde la violencia se esconde entre el silencio y la impunidad.
El Fiscal y Policía Todavía están trabajando para aclarar el caso, pero la sociedad todavía está esperando respuestas … y justicia.
José Fernando … tu vida no se puede olvidar
José Fernando Camargo Bastidas tenía 20 años. Tenía sueños, familia, futuro. Dejó Ubaté para servir al país, pero Su vida es demolida de la manera más brutalY hoy solo hay el eco de su nombre entre disparos y carreteras solitarias.
De este medio, Nos unimos al dolor de tu familiade los que lo conocieron, de aquellos que no entienden por qué Una vida tan joven, tan limpia, terminó así.
Y aquí está la impotencia. Porque No hay respuesta que justifique lo que pasóNo hay suficiente comodidad cuando un niño no regresa a casa. No hay justicia que devuelva la vida.
José Fernando no solo puede ser otra víctima del silencio. No puede ser otra figura en un país que llora a los jóvenes que caen día tras día, mientras que los responsables se pierden entre la oscuridad y la impunidad.
A su familia Toda nuestra solidaridad y respeto. A él, Nuestro compromiso de decir la verdad, que su nombre no se elimina y que la memoria pesa más que la indiferencia.
Porque Su historia merece ser escuchada con dignidad. Y su muerte no puede ser castigada.
