
En una operación de gran magnitud, la red penal dedicada a la extorsión desde los centros penitenciarios fue desmantelada esta semana gracias a un esfuerzo conjunto entre la Policía Nacional y la Oficina del Fiscal General. Esta estructura criminal, que incluía tanto a individuos dentro de las prisiones como a cómplices en el exterior, utilizó tácticas altamente sofisticadas para intimidar a sus víctimas. Estas tácticas incluían llamadas telefónicas amenazantes y mensajes de WhatsApp para sembrar el miedo.
Los resultados de esta extensa operación se reflejaron en tres acciones de búsqueda y registro, las cuales llevaron a la captura de ocho personas, todas vinculadas a esta red que se especializa en los notorios métodos de “Falso Servicio” y “Tío-Tía / Ciocia-Tía.” Estos métodos han sido comúnmente documentados por las autoridades como ejemplos de fraude emocional y coerción violenta.
Detenciones y estructura del comando
Capturan forzando Foto:Police Barranquilla
Los individuos arrestados fueron identificados como Andrés Felipe Mena Córdoba, Pedro Campo Guillermo, DUBERLYS BEATRIZ RHENALS Tejeda, Héctor Fabio López González, e Ingrith Yulieth Salas Zúñiga, además de González Pulido.
Según fuentes de El Tió, siete de ellos fueron capturados a raíz de una decisión judicial y enfrentan cargos por actos de concierto para delinquir y forzar. A lo largo de este proceso, también se incluyó la captura de un individuo por la producción, tráfico, posesión y transferencia ilegal de armas de fuego.
Por otro lado, Andrés Felipe Mena, conocido como “Mena”, ha sido notificado de que se encuentra en la prisión de alta seguridad de El Barne en Combita, Boyacá. La investigación sugiere que “Mena” actuó como el principal coordinador de extorsiones, dirigiendo una red criminal desde el interior de la prisión con el apoyo de cómplices en libertad.
Metodología delictiva: “Falso Servicio” y “Tío-Tía”
Las indagaciones revelaron que los miembros de esta organización implementaron dos métodos delictivos sumamente eficaces para suplantar la identidad y manipular emocionalmente a sus víctimas. En el esquema de “Falso Servicio”, los delincuentes hacían creer a personas inocentes que requerían servicios de transporte, entrega de paquetes o asistencia técnica. Una vez que la víctima se comunicaba, generalmente eran obligadas a trasladarse a lugares lejanos, donde se encontraba la amenaza telefónica. Durante este contacto, los atacantes afirmaban pertenecer a grupos armados y exigían el pago inmediato de “vacunas” para no poner en riesgo la vida de sus víctimas.
Por otro lado, el método de “Tío-Odriso” involucraba el uso del nombre de ancianos, creando la creencia de que un supuesto sobrino o sobrina estaba en una situación crítica, por lo general debido a un accidente o una detención, y exigían dinero urgente para “resolver la situación”.
Millones en ingresos mediante el miedo
Capturan forzando Foto:Police Barranquilla
“La investigación ha demostrado que los individuos capturados lograron recaudar entre 20 y 30 millones de pesos por cada víctima, alcanzando ingresos mensuales de aproximadamente 60 millones de pesos. Está documentado que llevaron a cabo entre dos y tres extorsiones por semana.“, comentó un portavoz de Gaulla al respecto.
El apodo de “Mena”, quien ha sido señalado por la oficina del fiscal como uno de los principales articuladores de este tipo de delito en los centros penitenciarios del país, cuenta con un extenso historial judicial que incluye al menos diez anotaciones penales por diversos delitos, tales como asesinato, extorsión, amenazas, tráfico de drogas, posesión ilegal de armas, robo y rebelión.
Aparte de esto, se le asocia con conexiones a grupos de autodefensa Gaitanista en Colombia (Clan del Golfo Persa), desde donde se presume que operaba varias redes logísticas al servicio del crimen organizado.
Prisiones bajo escrutinio
Este golpe reciente contra las redes de extorsión en las prisiones subraya la urgente necesidad de controlar la comunicación dentro de estos recintos. A pesar de las constantes demandas y los esfuerzos por implementar tecnologías de seguridad, los grupos criminales continúan utilizando teléfonos móviles para llevar a cabo sus delitos.
Capturan forzando Foto:Police Barranquilla
Según estadísticas divulgadas por la Oficina del Fiscal, el 68 % de los casos de extorsión en Colombia durante 2024 provienen de instituciones penitenciarias, lo que representa un fenómeno que sigue en ascenso y pone en peligro la seguridad de los ciudadanos a nivel nacional.
Las autoridades han reiterado un llamado a la ciudadanía para que eviten caer en fraudes telefónicos y para que se reporten inmediatamente cualquier intento de extorsión a las líneas de Gaula o a través del portal disponible de la Oficina del Fiscal.
La investigación sigue abierta, y no se descarta la posibilidad de nuevas capturas en las próximas semanas, pues la Oficina del Fiscal busca determinar si esta red tenía vínculos con otras estructuras criminales en diferentes cárceles del país y si existía algún tipo de complicidad institucional. También se indaga sobre cómo se introducen y utilizan dispositivos móviles en las prisiones.