
Esta fue la primera visita de Guns N’ Roses a Bogotá en 1992: un concierto bajo la lluvia marcado por el caos, lluvias torrenciales, un techo derrumbado y miles de fanáticos locos que escribieron una página legendaria en la historia del rock colombiano.
El 29 de noviembre de 1992 se realizó por primera vez en Colombia el concierto de Guns N’ Roses, presentación que estuvo marcada por múltiples contratiempos entre ellos lluvias incesantes que inundaron el escenario del estadio Nemesio Camacho El Campín, un techo derrumbado, disturbios de fanáticos enloquecidos con la llegada del grupo, y para colmo, la banda llegó desde Venezuela justo después de un golpe de Estado en ese país vecino que Dejó a los músicos “encerrados”. Según el empresario y productor Julio Correal, cuando la banda finalmente pudo llegar a la capital colombiana, los vehículos fueron obstruidos por miles de seguidores en el aeropuerto y en el hotel, llegando incluso a que un hombre de seguridad disparara al aire para “calmar” a los fans, y reportando que “llegó la banda, se bajó Axl Rose con la novia, sacaron las mechas y la agarraron de la cola”.
Ya en el escenario, las condiciones eran caóticas: el techo se había derrumbado, no había luces ni cobertura, y a esto se sumó el caos que provocaron miles de aficionados en las afueras del estadio El Campín. A pesar de todos los contratiempos y de que Colombia atravesaba un período de violencia marcado por el narcotráfico y bandas criminales, el concierto logró realizarse y selló bajo la lluvia el eterno romance entre el público nacional y Axl Rose, Slash y Duff McKagan, convirtiéndose en un evento mítico que los fanáticos colombianos recordaron durante 30 años hasta el regreso triunfal de la banda en 2022.