En cualquier rincón de Pasto, sientes el ritmo constante de la ciudad a través de motocicletas que llegan a Moto Oriente, un taller que ha estado dando vida a estos vehículos y muchas historias detrás de ellos.

Lo que comenzó como un proyecto familiar, una forma de generar ingresos, se ha convertido en una microempresa sólida, que no solo repara las motocicletas, sino que crea empleo y confianza en su comunidad. Dos talleres con herramientas modernas y repuestos para diferentes marcas son testigos del crecimiento y el esfuerzo constante de un equipo que sabe que detrás de cada máquina hay un propietario, una familia y un camino a seguir.

El taller no solo arregla los motores: Educa. Durante años, Moto Oriente abre sus puertas a los estudiantes, convirtiéndose en un espacio donde se comparte el conocimiento y se hereda el comercio. Por lo tanto, la experiencia se multiplica y el futuro asegura.

Detrás de cada equipo reparado está la historia de un emprendimiento que comprende los cambios en el mercado y las demandas técnicas, siempre dispuestas a aprender. La confianza de que las instituciones, los clientes y los aliados no se han dado es la coincidencia, es el fruto de un compromiso sostenido con la calidad y la honestidad.

Moto Oriente es un punto de encuentro para aquellos que viven el motor como parte de su vida. En sus 28 años, en lugar de fijar motocicletas, han tejido un apoyo y servicio humanos en el césped.